El café es una bebida muy popular en el mundo entero. Es el pretexto para hablar de negocios, para enamorar, para compartir una buena charla y para hacer filosofía. Muchos artistas han hecho sus mejores creaciones acompañados de una taza de café capaz de llamar y estimular a las musas. En cafés se han redactado manifiestos y declaraciones de principios de grupos de creación con estéticas vanguardistas.

En Brasil al desayuno se le dice café de la mañana. Los bares que aglutinan cultores de géneros musicales específicos se les dice cafés como los hard rock café o los jazz café, también están las salas que ofrecen servicios e internet a las que se les dice café internet. De ese néctar negro mucho se ha especulado y otro tanto se ha probado científicamente. El debate de sus bondades y efectos nocivos es constante. Las recetas que lo contienen surgen cada día, flan de café, pastas de café, biscochos de café, tiramisú de café, tarta de café, mousse de café y tantas otras cuyo nombre invita a la degustación.

Los más populares, el expresso, el cortadito, el cappuccino, el moka, el bombón y el americano, podemos encontrarlos en cualquier bar o restaurante con menor o mayor sofisticación. Cada uno tiene su estilo para servirse y se le establece un tipo de recipiente, ya sea taza, vaso o copa.

En la ciudad de Pinar del Río han proliferado los centros comerciales que ofrecen servicios de cafetería y restaurante. La calle Real, arteria principal de la urbe, recibe al visitante con el aroma de lo rural, de la naturaleza y enseguida te encuentras con el Café Ortúzar, un espacio que se ha convertido en punto de encuentro de todo tipo de persona que quiere disfrutar un sabroso café.

Estas imágenes las hemos hecho para matar la nostalgia de los amigos que por diferentes circunstancias no están hoy en casa, pero se les recuerda al sentir y degustar el sabroso néctar negro.